Quantcast
Channel: Sin casaca » Escrache
Viewing all articles
Browse latest Browse all 2

Emigrantes sin sanidad: guía para un presidente del gobierno cualquiera.

$
0
0

Ayer se hizo público que su gobierno, señor Rajoy, ha dejado sin sanidad a los parados de larga duración que pasen más de 90 días fuera del país. O traducido al lenguaje normal, a los 700.000 emigrantes (lo que llamamos Marea Granate) que hemos tenido que dejar el país desde 2008 obligados por las demenciales políticas económicas que tanto su gobierno como anterior han llevado a cabo.

Dentro de un rosario (y nunca mejor dicho) de medidas ultras, esta es además manifiestamente contraproducente para sus propios intereses. Siendo consciente de que sus asesores no dan para mucho más, y en un ejercicio de ciudadanía he decidido explicárselo de tal manera que incluso usted pueda entenderlo. Y es que quitarnos la sanidad a los emigrantes es una cagada múltiple, Mariano: 

Captura de pantalla 2014-01-04 a las 11.18.47

¿Qué? ¿Puteamos a los que han tenido que emigrar, a ver si alguno se hace de Sanitas? Así se escribe la historia, señores.

1) Cagada electoral:

Porque para las europeas, autonómicas y, especialmente, las generales de 2015 su partido va a necesitar como el comer cada uno de los votos que pueda movilizar, algo que ya es difícil en si mismo, viendo el malestar general. Y según el CSIC somos 700.000, Mariano. Y el derecho al voto (por mal que funcione en el exterior) aún está vigente. Con familiares, novios y amigas muy sensibilizados por nuestra partida. Un colectivo que te la va a guardar, y si bien es cierto que pocos de los emigrantes estaban entusiasmados con la idea de votarte, ahora te vas a encontrar, por ejemplo, con tradicionales familias vallisoletanas (de esas de banderita de España en la pulsera) que antes se cortan la mano que tocar una papeleta del PP.

2) Cagada económica:

Porque resulta que, Mariano querido, los emigrantes estamos salvándole el culo a la gestión de mierda que estáis haciendo en economía. En un solo trimestre, de junio a septiembre de 2013, nuestras remesas han sumado 1643 millones de euros. Mandamos pasta para completar la pensión no contributiva de nuestras madres, para pagar la hipoteca que dejamos en nuestras ciudades, para echar una mano a nuestro primo con la matrícula de la universidad. Es una inyección económica que -ya ves como son las cosas- se traduce en poder para presionar. Y no te quepa la menor duda de que lo vamos a usar: desde financiar un proceso judicial (que se está montando) hasta colaborar con aquellos partidos que nos garanticen la reversión de esta medida. Otros partidos que no son el tuyo, Mariano. Recuerda.

3) Cagada mediática:

Mire, Mariano. Le cuento un secreto. El paro no baja. La gente deja de apuntarse o, y sobre todo, emigra. Dicho de otra manera: nuestro exilio (el irse cuando uno no quiere porque no le queda mas remedio si es que quiere vivir dignamente) le está salvando el culo. Yo soy de Castilla y León, una comunidad que en el primer semestre de 2013 mandó fuera 13.780 menores de 40 años incluyéndome a mi. Seguro que hasta usted puede hacer un cálculo cruzando la cifra del paro de diciembre, el número de afiliados a la seguridad social en mi comunidad el mismo mes y una proyección (multiplique por dos) del numero de emigrantes durante el año pasado. Va a ver que resultado tan curioso. Con esta media nos galvaniza, nos visibiliza y nos cabrea todavía mas. Un ingrediente más para la tormenta perfecta que se están cociendo, que ustedes están creando.

4) Cagada legal:

Y es que la Constitución no está solo para citar de carrerilla los artículos que interesan para seguir manteniendo el chiringuito. Además, resulta que contempla una serie de derechos fundamentales que ni siquiera una mayoría absoluta puede reinterpretar. El artículo 43 reconoce el derecho a la protección de la salud; en su punto dos, además, establece que los poderes públicos deben “organizar y tutelar la salud pública a través […] de las prestaciones y medidas necesarias”. Si a esto añadimos la igualdad de todos los españoles ante la ley, resulta que te encuentras con un problema. Y vamos a hacer todo lo posible para que, de la manera más rápida, mediática y humillante para ustedes el asunto se judicialice. Que ya tienen intensas experiencias al respecto.

Esta tarjeta me la he pagado yo, Mariano. No me la ha regalado usted.

Esta tarjeta me la he pagado yo, Mariano. No me la ha regalado usted.

5) Cagada moral:

Mire, Mariano: mi tarjeta sanitaria me la he pagado yo, con mis años cotizados, con mi trabajo, con el sudor de mi frente. Usted, que lleva tres décadas cobrando un sueldo público como exponente excelso de esa casta de políticos profesionales y que no han dado un palo al agua desde que se sacó una oposición a registrador, no me ha regalado nada. Y menos aún, mi derecho a la cobertura sanitaria. Hace falta ser miserable, algo que ya demostró dejando fuera del sistema público a casi un millón de inmigrantes. Ahora, en una vuelta de tuerca que confirma algunas sospechas, va a por los siguientes, a por los que estamos fuera. Pero le va a estallar en las manos, porque tontos del todo no somos: ¿quienes van a ser los siguientes sin tarjeta? ¿los que tengan una pensión no contributiva? ¿los becarios? ¿las retornadas? ¿A cuanta gente pretende obligar a sacar un seguro privado? ¿Cuantos amiguetes, cuantos donantes, cuantos financiadores suyos tienen intereses en la sanidad privada?. Se lo repito, sr. Rajoy: es usted un miserable. Y esta vez (otra mas) ha pinchado hueso, porque además es torpe. Así que nos vemos en sus visitas oficiales -escrache es una palabra casi uruguaya-, en las urnas y en los juzgados.


Viewing all articles
Browse latest Browse all 2

Latest Images

Trending Articles





Latest Images